Después de una semana de haber llegado a Barcelona al fin todo esta en orden en casa. La ropa limpia, planchada y en su lugar. Esta vez le tocó planchar a Paco… no esta mal ya va aprendiendo
Mientras limpiábamos la casa a fondo, empezó una gran tormenta de verano, un chaparron de agua muy fuerte que pasó en pocos minutos, pero retorno al poco rato y duró un poco más.
Yo salí al balcón a ver la lluvia y sentir el olor a tierra mojada que me encanta…. es como volver a mi infancia y recordar el olor de la selva donde nací y viví.
Aunque este verano ha sido muy seco y eso ha afectado a las plantas que no han podido desarrollarse como es debido y claro ha repercutido en los precios de las frutas y las verduras.