Tania salía ayer de fiesta por Barcelona, era la despedida de soltera de Mónica, una chica venezolana amiga. Fuí a recogerla después de cenar a Barcelona y, claro, sumergerte en una despedida de soltera femenina cuando se van de bares, pues la verdad, cuesta poco…
Así que me uní a la fiesta y estuvimos hasta las 4 de la mañana de parranda. Estuvo muy bien, mucho baile, muuucho calor y después un gran sueño reparador que acabó con un desayuno de churros con chocolate.