El último lugar de nuestra odisea por Austria nos llevó a Hallstatt, aqui podéis ver las fotos, un idílico lugar con paisajes de los más hermosos, era como mirarse dentro de una postal. Es un lugar encerrado entre montañas y un tranquilo lago.
En lo alto del pueblo se encuentra la Pfarrkirche (iglesia parroquial) con frescos góticos y tres altares con alas, el de la derecha representa a Santa Bárbara, Santa Catalina con la Virgen en el centro. Aqui arriba también se encuentra el cementerio con pequeñas tumbas familiares, ya que se ve solo un rectángulo y en la lápida el nombre de varias generaciones. Lo cual nos llamó la atención, ya que todas las tumbas estaban en el suelo, muy bien cuidades con flores y más que cementerio parecía un jardin.
Seguimos caminando recorriendo ese misterioso cementerio y detras de la iglesia llegamos a Beinhaus (osario) al entrar en él descubrimos innumerables cráneos apilados unos sobre otros y algunas tibias también perfectamente ordenadas. Al lleer la historia nos enteramos que en ese lugar pasado 10 años de la muerte se colocan los cráneos ya que no hay espacio en el cementerio y así las tumbas se reutilizan y sólo se conservan los cráneos decorados con alguna flor, o alguna serpiente símbolo de la muerte. Un lugar curioso pero sin duda escalofriante.
En el lago había muchos cisnes que se apresuraban a coger un trozo de pan en el agua. Las estrechas callecillas están rodeadas de pintorescas casas con balcones y flores, y muchas tiendas donde se aprecia diversos adornos hechos con sal, ya que aquí se encuentra la Salzbergwerk (mina de sal). Al que se puede acceder en funicular o a pie: en funicular más la entrada a las minas de sal cuesta 21 euros, a pie resulta unos 30 minutos andando por un camino agradable entre árboles, un poco agotador si no se lleva calzado apropiado, ni agua, por suerte unos bocadillos que hicimos en el albergue nos dieron fuerzas para seguir andando y llegar hasta la parte superior.
Desde aquí a pie a 10 minutos más está la mina de sal. Pero resulta que al llegar ahi nos dimos con la sorpresa que la entrada sola valia 15 euros cada uno y solo para ver un poco de sal y a un minero de hace 3000 años en perfecto estado de conservacion por la sal, y que se descubrió en 1735. Asi que dimos una vuelta por ahi viendo algunos restos arqueológicos que habian encontrado cerca de la mina y hacernos fotos con unas ovejitas que pastaban por ahi. Decidimos bajar en el funicular, pero contentos de haber disfrutado de la subida, aunque mientras lo haciamos no pensábamos lo mismo.
Un lugar para soñar, para inspirarse y sin duda para descansar rodeado de naturaleza. Lluvia otra vez apareció. Compramos un candelabro hecho con sal y corrimos al coche para despedirnos de este lugar cautivador con ganas de volver algún día.
Graciela
1 febrero 2010 at 4:44
¿Alguien me puede informar sobre hospedaje barato en Hallstatt? Necesito habitación para 3 adultos.
Muchas gracias
Graciela, de Argentina
graciela - Chile
8 junio 2007 at 3:20
jajaja…yo tampoco pagué por la extracción de sal…a esa altura ya casi no me quedaban euros….
Hallstatt muy muy lindo…las fotos son como de postal…y aunque me traten de loca..ese lago lucía en parte como algunos del sur de Chile
eso..chauuu
Xell
23 noviembre 2006 at 15:36
Hola Tania,
El próximo aí±o como viaje de novios nos vamos a Austria y me gustaría que me dieras información ya que nos vamos a montar el viaje nosotros mismos.
Dime sitios bonitos y lugares especiales donde ir y además que es lo que no debemos perdernos.
también te agradeceria que me dijeras algunas cosas a tener en cuenta.
Muchas gracias