«Nada está decidido hasta el último minuto», esta es una de las frases mas acuñadas y usadas en el fútbol. Junto a otras como «el fútbol es así», «no hay rival pequeño», «el arbitro no nos ha favorecido»… son frases que resumen lo acontecido en 90 minutos (y algo) de partido.
Este domingo pasado, en el Lluís Companys de Barcelona, tuvo lugar el Espanyol – Mallorca. No parecía un gran partido, ausentes Tamudo y Kameni por su expulsión en el anterior partido, pero lo cierto es que dio mucho de sí.
Mallorca se adelantó en el marcador, poco después de comenzar la primera parte, cuando el Espanyol no daba pie con bola en defensa. Se veía un equipo con grandes carencias, sobretodo en el medio campo donde no tenía el balón y esto hacía sufrir mucho a la defensa.
Sin embargo, el empate de un entregado Lluís Garcia, de penal, fue un revulsivo para el equipo. Finalmente, no sin sufrir, las ganas y el pundonor dieron la victoria a los blanquiazules, con otro golazo de Lluís Garcia en el último minuto.
Para la posteridad: «Que malo que es Ewerton».